Instrumentos de tortura utilizados por la Inquisición, vitrinas con frascos con fetos y tumores cancerígenos o una isla habitada por muñecas de juguete: la capital mexicana tiene más de 150 museos. Y algunos son extraños.
Instrumentos de tortura utilizados por la Inquisición, vitrinas con frascos con fetos y tumores cancerígenos o una isla habitada por muñecas de juguete: la capital mexicana tiene más de 150 museos. Y algunos son extraños.